UN BREVE RECUERDO DE NINA Y AARÓN

Mi mamá Nina ( Eugenina ) Voronovisky, tenía una formación independiente y valiente. Había llegado a los 16/7 años a Buenos Aires, en 1905, junto con su mamá Rosa, y 7 hermanos, escapando del pogrom de Odessa de 1905 donde habían asesinado a su padre León... ( Por eso la abundancia del nombre Leonardo en la familia ).

En la Argentina se vinculó con otros emigrantes judíos de su ciudad natal, las hermanas Cherkoff que adherían al socialismo y habían militado antes en Rusia, y con Rebeca Sigal y su esposo que mantuvo en Buenos Aires, su profesión de comerciante de cereales que originalmente tenía en Rusia al igual que el padre de Nina.

Nina que simpatizaba con los socialistas revolucionarios rusos desde jovencita, había estudiado música con Lalevich en Odessa y en Bs. As. se volvió a encontrar con este prestigioso maestro que continuó aquí su escuela de piano y composición donde salieron pianistas argentinos de nivel mundial, Creo que el encuentro fue en el conservatorio del famoso maestro de piano Scaramuzza.
Antes del asesinato de su papá se había trasladado a Kiev para prepararse para entrar en la carrera de odontología de esa universidad ucraniana, desde donde regresó en el primer tren para unirse junto a su familia ante la noticia del pogrom y del crimen contra su papá .

Con su compañero Mauricio Klimann, agrimensor, políglota, socialista, liberal, democrático, cofundador de bibliotecas, centros y periódicos, ambos emprendedores,,,no se casaron,,, y tuvieron 3 hijos, el primero nació en 1907, fue mi hermano mayor Leonardo, la segunda Rosa que nació en 1909, y la tercera María Isabel que nació en 1911. Nina enviudó entre 1913/4. Era tesonera y combativa, y no bajó los brazos...

Conoció a mi viejo Aarón Klasse en 1921, en el conservatorio de Scaramuzza.
Aarón había nacido en Glusk una aldea de Rusia Blanca , hoy Besarabia , muy parecida a las que pintaba Chagall o a la de la película " El Violinista En El Tejado" donde todos los miembros de su familia tocaban un instrumento y formaban la "orquesta" del pueblo para fiestas y casamientos, En paralelo cada uno tenía un oficio para ganarse la vida: carpintero, herrero, carnicero...

Había llegado a la Argentina en 1919 ofreciendo conciertos de violín en una exitosa gira artística por América Latina iniciada en New York, donde residía , trabaja en orquestas clásicas, y daba conciertos desde hacía unos años. Tuvo mucho éxito en Buenos Aires, y admirado por la prosperidad del país resolvió quedarse, ofreció infinidad de audiciones, fundó un cuarteto de cuerdas con músicos de primer nivel del Teatro Colón, -- donde él había ganado un concurso para primer violín, primer atril, -- y creó una orquesta sinfónica de aficionados. También y fundamentalmente el Conservatorio al que puso su nombre. Nunca dejó de mencionar agradecido y con legítimo orgullo que el había estudiado con el famoso maestro Leopoldo Auer en San Petesburgo, de la escuela de violín de Joachim, que brillaba por sus alumnos como Jasha Heifetz, Misha Elman, Efrem Zimbalist etc, y con otros maestros como Alexander Glazunov que Aarón conoció junto a Peter Prokofiev otro discípulo de composición muy talentoso y brillante ya en esa época. En su propio Conservatorio argentino Aarón Klasse tuvo discípulos excepcionales: Ricardo Odnoposoff, Jaime Tomasow, Elías Slon, Simón (Buby) Weitzman, Julián Olevsky, Eduardo Acedo, Horacio Brodsky, Blanca Hirsh, Haydée Zipman, Abraham Buchhalter, Saúl Michelson, Ignacio Safir, la señora Unger, Abraham Selikson. Muchos triunfaron aquí y en el exterior como concertistas y primeros violines, y fundaron sus propias escuelas de música. En todos sus años Nina lo estimuló, lo ayudó y fue su mas activa, generosa, y entusiasta admiradora.

Nina y Aarón se enamoraron alrededor de 1921. Quedó embarazada de mi a fines de 1922. Yo nací en 1923. Mi hermana Noemi en 1924. Antes de mi nacimiento contrajeron matrimonio.

Ella durante su viudez de Klimann, mantuvo su casa dictando lecciones de piano y canto, primero en la Sociedad Luz de la Boca, que Klimann había cofundado, y luego en centros y bibliotecas socialistas, y en su propia casa de la calle Paez 2738 (entre Condarco y Terrada) en Flores. Viuda, hermosa y elegante, tuvo festejantes (Mario Bravo y algunos otros dirigentes socialistas) que rechazó porque su prioridad eran naturalmente sus hijos y no tenía "tiempo para romances teniendo que educar a 3 chicos ", como solía decir. Era absolutamente sufragista, abanderada de la igualdad de los sexos, y partidaria de lo que entonces se llamaba "el amor libre", es decir la vida en pareja sin contraer el matrimonio ni civil ni religioso, basada en el amor... Afirmaba que "La base de toda relación humana debía ser la buena fe y la palabra empeñada". Era estricta y mantenía una moral puritana.
En Buenos Aires mantuvo estrecha amistad con Nicolás Repetto - ya casado con Fenia Cherkoff, escultora que le hizo un busto, con Victoria Gukovsky, con Enrique Dickmann y su familia, con Alicia Moreau cuando se casó con Juan B. Justo (antes había sido compañera de Enrique del Valle Iberlucea ) y la plana mayor del socialismo argentino., Bogliolo, Oddone, Américo Ghiolddi, Mario Bravo, y varias mujeres con las que fundó, en el 2do. piso de la Casa del Pueblo, de la calle Rivadavia 2150, -- después incendiada junto con su importante biblioteca, por las turbas peronistas -- la revista Vida Femenina, a la que contribuía con artículos.

Al iniciar el secundario mis compañeros venían a casa y se quedaban estudiando, jugando. y comiendo. Luego ingresé a Derecho y a las juventudes socialistas. Después de mis 17/18 años, y ya entrados los años 40, comencé a traer amigo/as políticos. Ellos se reunían en casa a conversar, a leer, a escuchar música, almorzaban, y cenaban. Muchos charlaban y discutían con Nina . Ella, los invitaba a comer, no se de donde sacaba la comida para mesas enormes porque eran mas de 5 o 6 sumados a mis 4 hermanos y yo (esta ya era un clásico de nuestra casa de la calle Bartolomé Mitre 3312 ) y luego cuando pasábamos a la sala donde papá y mama dictaban sus cursos , o a mi habitación, Nina a veces venía , conversaba y/o discutía cara a cara con nosotros las noticias del día. En particular las novedades políticas nacionales y mundiales.

Cuando estuve preso en la Penitenciaría Nacional de la calle Las Heras, en 1951 y en 1953, y durante la ocupación de las facultades en 1945 para defender la autonomía universitaria, todos los días trataba de enviarnos comida y periódicos, a mí y a Noemi, que era estudiante de letras, La Policía la había llevado a la cárcel de Mujeres, donde también mamá enviaba sus vituallas. Nina se plantaba desde la mañana a la noche frente a la "ocupada " de Derecho donde estaba yo, o frente a la de Filosofía donde estaba mi hermana.

Mis amigos se hacían amigos de ella, y por tal motivo cuando falleció en 1959, con ellos que ya formaban parte del grupo familiar, en particular Percy Lemos, Saúl Cherny, Eliseo Barrios, Jaime Roitzenvag, Anita Schuster, Julita, y el Ñato Mario Raurich, mi hermana Noemí y yo, decidimos tomar juntos el tren en Constitución e irnos todos a Mar del Plata.
Como era una enamorada del mar, nunca dejaba de recordar con emoción su querido Mar Negro en Odessa, y no perdía temporada en Mar del Plata, donde decía que "tomaba aire puro" caminando ida y vuelta desde La Perla al Puerto. En el puerto compraba, junto a alguna de sus amigas, en la borda de los barcos pescadores un kilo de los infaltables langostinos "frescos" y allí los saboreaba con limón.

Cuando se sintió enferma, Nina que siempre se definía como "una libre-pensadora", pidió que al morir la cremaran, siguiendo la tradición liberal de socialistas, masones y agnósticos argentinos, y sus cenizas fueran arrojadas al océano.

En un espigón de La Perla, zona en la que solía pasear durante sus veraneos, en un atardecer, arrojamos la urna de madera, con las cenizas al mar. Lo curioso es que la urna no se hundió sino que la tapa se levantó y hacía de vela, y la brisa marina empujaba la caja que flotaba en el océano hacia el Sur-Este. La luz del sol ya bajo en ese crepúsculo, iluminaba la caja y la tapa mojada espejaba la luz del poniente hacia la playa donde estábamos nosotros, y durante infinitos minutos se fue flotando entre las espumas y las olas. Cuando ya era un punto de luz en el horizonte uno de nosotros comentó: "Nina nunca se hunde "... finalmente la caja desapareció detrás de algunas olas lejanas....

Isay