viernes, 6 de marzo de 2009

Nicolás Babini

Muy estimada amiga Nora Bär:

No sabes cuanto te agradezco la nota que escribiste ayer en La Nación sobre mi antiguo y querido amigo Nicolás Babini.
Fui desde muchacho amigo de su familia. El insigne profesor José Babini, creador de la Facultad de Ingeniería Técnica y Agrícola de la Univ. del Litoral, y su esposa, me invitaron a vivir en Santa Fe y compartimos con Nicolás, Mirita y Nami unos días memorables. También estuve estrechamente vinculado con los Eichelbaum, en particular con Ana María (la Negra) y con Edmundo.

Nicolás (Nicucho) fue un arquetipo de luchador de la libertad y de la democracia en la Argentina.
Su paso por la Universidad es memorable al abanderarse en el movimiento de la Reforma Universitaria con las causas más modernas de las ciencias y de las humanidades. Como profesional fue el arquitecto de la casa de mis padres en Pueyrredón y Gutiérrez en Acassuso, en cuyos planos, para un pequeño terreno, tuvo que padecer estoicamente los requerimientos de cada uno de los miembros de mi familia.
Mas tarde desde mi editorial Marymar colaboramos con Nicolás en algunas de sus publicaciones ejemplares. Recuerdo con alegría su pujanza y su espíritu abierto a los nuevos horizontes científicos que pudieron ser difundidos con sus ediciones.

Vayan estos mis palabras de reconocimiento junto con mi renovado aplauso por tu escrito que resume los trabajos, las ideas, y las esperanzas de ese noble y amable ciudadano ejemplar que fuera Nicolás Babini.

Muy cordialmente, tu amigo
Isay